Por: Bibiana Buchbinder

Hace un año atrás, la vida nos encontraba brindando tradicionalmente por un nuevo año, expresando nuestras expectativas de paz, amor, prosperidad y salud. A poco de andar, el 2020 nos sacudió con sorpresas y desafíos a nivel individual, familiar y comunitario.

De forma progresiva debimos restringir espacios de intercambio, cambiar conductas de higiene, adoptar distancias personales y regular hábitos de trabajo y convivencia.

Aunque todos somos parejamente susceptibles de ser afectados por las medidas de distanciamiento de la pandemia, los datos provenientes de estudios de investigación indicarían que algunos grupos, en circunstancias mas desfavorables, serían mas vulnerables.

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